Muchas veces te has topado en el trabajo con presentaciones aburridas, irrelevantes o confusas. Intenta recordar ahora algunas de las presentaciones efectivas que te haya tocado ver: aquellas motivadoras, informativas e inspiradoras. ¿Qué deberías tener en cuenta para lograrlas tú también y cautivar a tu audiencia? Comienza por evitar algunos de los errores más comunes:
- No hacer las presentaciones suficientemente relevantes: No destines tiempo ni lugar de tu presentación a destacar datos obvios, ni tampoco las colmes de imágenes salvo que estas vengan a cuenta.
- Saturarlas de información: También es un error sobrecargar a tu audiencia de datos y de información nueva, lo que puede hacer que la presentación se extienda más de la cuenta o que resulte confusa.
- Colocar demasiado texto en una diapositiva: Recuerda partir la información en diferentes bloques, lo que hace a presentaciones más ágiles. Tampoco es necesario que todo lo que expongas esté en la diapositiva, ya que tu presentación se torna redundante.
- Utilizar el humor en forma inapropiada: Cuidado con los chistes, juegos de palabras o imágenes, ya que si bien utilizadas en pequeñas dosis pueden aportar a la efectividad de la presentación, también pueden restarle profesionalismo.
- No ser cuidadoso con el diseño: Una presentación que contiene demasiadas tipografías mezcladas, con colores chillones o con información de los gráficos poco visible, no será apreciada por más que tenga un contenido válido.
- No estudiar el tema lo suficiente: Las presentaciones efectivas se consiguen cuando conoces a la perfección el tema del que hablarás y estás en condiciones de reformular tus propias frases si algo no queda claro.
- Ignorar a tu audiencia: Procura siempre sonreír, mirar a los demás a los ojos y estar abierto a sus preguntas.
Curso recomendado:
Curso Presentaciones Efectivas
Curso Online Presentaciones Efectivas
miércoles, 10 de agosto de 2016 11:17:00 a. m.
Categorías:
Habilidades Gerenciales